jun
06
Las elecciones colombianas, con sus particulares resultados, pueden ser una lección estratégica, política, electoral, de Estado, aún en medio de unas expectativas no satisfechas desde el ángulo de la emoción, o la consulta de opinión.Primera elección, en décadas, donde la violencia no es la principal protagonista, y en la que –a pesar de no ser obligatoria para sus ciudadanos- hay una concurrencia mayor al histórico de los países donde si lo es.
Demostraron que, manualmente, con una población electoral parecida a nuestra población total y sin las mil millonarias máquinas de smarmatic, se puede dar el resultado en hora y media, y a la vista de cámaras de TV…para vergüenza de nuestro CNE.
Replantean la política colombiana, frente al agotamiento de sus dos estructuras más tradicionales –conservadores y liberales- con partidos emergentes… el de la U, y el Verde, quienes en lo inmediato sustituyen de un plumazo décadas de tradición y dominio en los espacios políticos del vecino país.
Y lo que luce como error de las encuestadoras…pudiera ser una posibilidad estelar de estudiar fenómenos sociales de fondo, que comienzan a aparecer en la política doméstica de esta parte de América, tan dada a quedarse en las etiquetas y en la emoción a la hora de la preferencia política o argumental.
Un trasvase, previsto tímidamente por Gallup, de los votos de Mockus a otras candidaturas, la “lealtad” a lo que significa el “uribismo” por encima de la preferencia particular del candidato, el descuido de las zonas rurales en el diseño de la muestra, la “franqueza” del encuestado, el obviar en la “lectura” sentimientos generados por la seguridad que hoy disfruta el ciudadano; la preeminencia de la estructura sobre la emoción; el contraste de un partido organizado, frente a uno de solo consignas y flores; el ánimo que subyace como agradecimiento al bienestar conseguido, aún por encima de la postulación particular; gente que no es de Santos, que incluso no estaba convencida de sus bondades, pero que a la hora de votar lo vio como el candidato de su propio bienestar… y por la otra, un Mockus sobre estimado, ambiguo, folklórico, a quien sus comentarios sobre Chávez, la extradición de Uribe y Santos, las muchas contradicciones y el desear la mujer del prójimo relajaron su credibilidad. Eso se impuso por encima de sus logros, y los de su equipo, al frente de exitosas alcaldías colombianas…
Si bien la emoción pareciera ser la antesala de la consolidación de la militancia de un partido...mientras ésta no se internalice, no despertará la lealtad del individuo. En Venezuela, cuando nació el MAS –a título de ejemplo – también un color (el naranja) refrescó el espacio electoral, con consignas pegajosas e inteligentes, además con la concurrencia de sectores intelectuales del país al proyecto, con José Vicente Rangel de candidato…que puso a Fedecámaras a correr pensando que podía ganar, y a apelar a comerciales de contrapropaganda sin antecedentes en el país…pero nada pasó. El llamado “voto cautivo” que una vez manejara como posesión particular especialmente Acción Democrática –a tal punto que llegaron a afirmar que si postulaban a sombrero blanco, a sombrero blanco se escogía- sigue, en nuestros países, alimentando actitudes que van más allá de la emoción… la economía del voto (Boris Buminov Parra), la tradición, y la lealtad por encima incluso de la conveniencia…así lo han determinado. Después de la erosión de la emoción bolivariana en este lado de América, el sub continente pareciera regresar a la serenidad. Rechazando gritos, armas, ineficiencias, corrupción y provocaciones innecesarias…a punta de votos. Más allá de consignas y solapas de libros. A “curar” la resaca con quien pueda producir la mayor suma de bienestar… sin arrebatarle nada a nadie. A escoger a quien puede dar testimonios de eficiencia…en medio de ese requerimiento pragmático de satisfacer necesidades y no ideologías.
Mockus, por su parte, si no va más allá de consignas e irreverencias para la galería, habrá visto después de esta jornada…concluir sus 10 minutos de gloria!
PATIBULARIO
• Solos, en su campaña, los candidatos de la oposición. Los partidos que dicen apoyarlos…como en la cédula. Mientras, en el PSUV los aspirantes siguen confiando en el portaviones. Y en el PPT, a que el lomo de Falcón aguante!
• Mientras el oficialismo, a paso redoblado, progresa en el control de importantes sectores de la vida nacional, asegurando el poder ejecutivo, judicial, legislativo, electoral, militar; y con avances significativos en el productivo, financiero, comunicacional y alimentario… algunos “mangasmeadas” de la dirigencia opositora, siguen frente al espejo en ese tamunangue de vanidades que intenta estrategias unitarias solo en procesos electorales. Nadie los escucha articular palabra, mucho menos planes, frente a una ofensiva discursiva y procedimental que –al paso que va- poco o nada dejara para ellos y sus proyectos, en lo mediato.
• Contraste: Para azules y rojos, bacalaos son los importados en sus postulaciones…para los de la oposición, bacalaos son los partidos que los postularon
• En ese torneo de dedos...cuidado si el ciudadano común decide usar uno de los suyos, y en Septiembre les hace a todos aquella fea pero clara seña!
• ¿Quién responde por tanto interno muerto bajo la custodia del Estado, quien está en la obligación de garantizarles la vida?
• El grave problema con algunas encuestas es el que, de herramienta de medición sociológica, se han convertido en instrumentos de campaña electoral
• Santos sale a segunda vuelta a buscar 4 puntos....Mockus, 29!
• Lo dijo Konrad Adenauer: “En política, lo importante no es tener razón…sino que se la den a uno”
• Asistí al Reina de Lara. Un espectáculo televisivo de factura nacional. Mi reconocimiento a Sofía Kossowski y a PROMAR TV.
• Saludamos a ARS en su 27 aniversario. Nuestros parabienes al exitoso equipo que comanda Fernando Guédez
Diario El Informador 06.06.10
Controversia
Lic Víctor M. Barranco C.
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